la libertad de expresión es la punta de lanza hoy en día, cada uno tiene derecho a ejercer y expresar sus opiniones. es esto realmente lo mejor ? tanta libertad no termina en un total libertinaje?.
muchos dirán que los derechos de uno empiezan donde terminan los del otro, al parecer el dicho popular solo quedo en lo que es ... un dicho.
esta exposición por así decirlo es un ejemplo un tanto extremo pero no deja de ser parte de una realidad.
nadie pone bajo la lupa la expresión de cada uno, pero claramente hay lugares y momentos donde poder expresarse.
la "muestra" tubo lugar en la facultad de ciencias sociales de la UBA bajo el nombre de "postporno"
cada uno podrá juzgar desde su óptica si esto es arte o no.
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lunes, 2 de noviembre de 2015
lunes, 19 de octubre de 2015
un horror pedagógico
Sábado 17 Octubre 17:02
Una escuela francesa permite a sus alumnos probar fusiles de asalto
No obstante, las autoridades educativas, que han convocado a los profesores para que explicaran el incidente, sugirió que había sido más el resultado de un exceso de entusiasmo que un ejercicio siniestro.
El taller podría haber pasado desapercibido, pero una fotografía publicada en las redes sociales que muestran una docena de niños tumbados en el suelo como soldados, con los dedos en los gatillos de los rifles de asalto desató la polémica.
El taller podría haber pasado desapercibido, pero una fotografía publicada en las redes sociales que muestran una docena de niños tumbados en el suelo como soldados, con los dedos en los gatillos de los rifles de asalto desató la polémica.
Alertado por los medios de comunicación, el portavoz del Ministerio de Defensa, Pierre Bayle, dijo que se tomarán las medidas disciplinarias. “El ministerio condena firmemente esta acción”, dijo.
“Este fue un error pedagógico claro”, dijo Albert Jaeger, un funcionario de la administración regional de educaciónque aseguró que era posible que hubieran sanciones contra los docentes.
Varios reservistas del ejército participaron en el evento, diseñado para explicar la vida militar a los jóvenes alumnos en una escuela en Flastroff, un pueblo con una población de alrededor de 300 personas.
Los niños llegaron a inspeccionar vehículos blindados y degustar raciones de comida de los soldados, además de la sesión donde manipularon fusiles descargados y pistolas automáticas.
Fuente: Clarin.com
jueves, 15 de octubre de 2015
materia "vida"
vamos a hablar un poco de las materias a las que nos enfrentan o los temas de importancia en nuestra futura profesión.
hay que innovar en las técnicas de enseñanza, hay que motivar a nuestros alumnos, hay que respetar la igualdad cultural, hay que preocuparse por el bienestar del alumno, hay que fomentar la higiene y la actividad física.
temas hermosos para tratar y discutir, pero cuando vamos a hablar de verdades como: ¿que hacer para superar la frustración propia? como afrontar los retos que conllevan tropezar con la misma piedra una y otra ves. ¿en que momento se toma al alumno terciario como persona? ¿alguien nos pregunta estas bien? ¿necesitas una mano?.
¿donde esta la materia vivir? parece que la persona deja de ser persona en el momento que el titulo esta encuadrado y colgado en la pared, en ese preciso momento el individuo deja de serlo para convertirse en un omnisapiente ser que carece de errores y al cual no se le puede retrucar ninguna afirmación.
te enseñan a salvar una vida pero te ponen en letras chicas la advertencia -"si sale mal, la culpa la tenes vos"
la frustración es muy complicada y mas cuando pedís una ultima llamada y nadie te atiende, ¿que hacer cuando ves perder un año entero por un punto o una falta?.
juntar las lagrimas o contarlas no sirve de nada si total ese camino ya lo pasaron los que hoy tienen tu futuro en las manos, pero parece que las angustias ajenas no nos afectan y nunca nos van a afectar.
solo un par de lineas para pensar o reflexionar...
castigo o premios
de que manera se educa a un hijo si se lo obliga a hacer cosas como esta ?, cual es el mejor castigo? esta bien ? esta mal? el castigo esta bien?.
hace unos años un profesor me contó una historia (real o no hace pensar)
resulta que en un barrio como los de antes donde los chicos juegan (o jugaban) a la pelota en la calle, esas calles que no conocen el asfalto , donde las cloacas son espejismos de promesas no cumplidas y las zapatillas cuelgan misteriosamente de los cableados aéreos.
casi religiosamente cada día el silencio de la hora de la siesta se veía interrumpido por los gritos de gol y los pelotazos de esos pequeños que le escapaban a la leche chocolatada para correr detrás de esa pelota maltrecha que pedía el cambio hace años.
"el estadio"no era mas que un terreno baldío que lindaba con la casa de don ernesto (para darle un nombre a quien no lo tiene por falta de información) gran amante del fútbol y conocedor del deporte, esa pasión era cada ves menor a causa de los incesantes pelotazos en la pared que daba a su habitación.
don ernesto pensaba ... que hacer ? como hacerlo? en que momento? tratando de armarse de valentía para enfrentar a los borregos que se hacían presentes todos los días en el terreno.
un día encontró lo que le faltaba para encarar la situación y decidió a caminar los pasos necesarios para llegar al campo de juego, esos 33 pasitos fueron violentos para el pobre viejo de 75 años. una ves en el terreno opto por el silencio, solo se limito a cruzar sus brazos detrás de su cuerpo y observar el partido. pasaron las horas y la intensidad del juego gano el partido, los chicos cansados con la lengua afuera y los músculos al borde del calambre se marcharon con un sola intriga, -"quien es ese viejo? y por que nos mira jugar?".
ya en la tercer fecha la curiosidad gano y el capitán altanero del equipo amateur se dirigió a don ernesto
capitán -"¿que onda viejo?, ¿por que venís todos los días ?.
don ernesto -"que haces pibe. vengo por que me encanta ver como juegan a la pelota."
"el capitán" desconfiado vuelve al partido, otra ves el cansancio termino el partido y los dos equipos volvieron a sus casas (los dos equipos no llegaban a 7 y la suma total de los años no superaba a la de ernesto)
al día siguiente los mismos protagonistas se vieron las caras en el campo, esta ves antes del "pitazo inicial" ernesto se acerca al capitán y le dice:
don ernesto -"pibe toma...(estirando su mano en dirección al pibe)"
el chico casi de reojo acepta lo que el viejo le ofrece, para su sorpresa de la mano del viejo se desprenden 6 monedas brillantes. el pibe no entendiendo la situación interroga al viejo.
capitán- "mmm... ¿que es esto viejo?
don ernesto -"esto es para ustedes, para asegurarme que vengan todos los días, por favor no falten."
el niño contento vuelve al partido con el botín conseguido, mostrandole a sus compañeros lo que el viejo le había entregado y explicando la situación.
pasaron los días y el pago no se hacia esperar, día tras día el viejo entregaba las monedas a los chicos repitiendo que quería verlos jugar día tras día.
al día 15 el viejo entrega la plata pero en esta ocasión entrega menos monedas, los pibes pensaban "no importa, menos plata ... total estamos jugando" nunca olvidando el relato constante del viejo que repetía sol tras sol el "no falten por favor".
los días siguientes la suma siguió achicándose hasta que un día el viejo no entrego mas monedas, claro que su suplica seguía presente "por favor no falten".
el primer día sin pago paso el segundo también, en el tercer día el capitán pidió el pago por sus servicios futbolisticos , a lo que el viejo respondió con un -"no tengo plata, pero por favor jueguen"
el capitán y sus jugadores pegaron media vuelta agarraron y nunca mas volvieron. cual fue el motivo? simple, ellos no iban a jugar gratis para entretener a un viejo.
que es lo que nos hace pensar esta historia? como al principio puse, están bien los castigos? habrá gente que diga que si y personas que digan que no. pero algo esta claro la recompensa o la premiacion tampoco es una salida para obtener un resultado, por que la falta de ella es contraproducente.
articulo de "el país"
Ética en la escuela
Formar ciudadanos responsables es el único modo de contar con buenos profesionales
Dicen algunos expertos en estos temas que las gentes formulamos juicios morales por intuición, que no tenemos razones y argumentos para defenderlos, sino que tomamos posiciones en un sentido u otro movidos por nuestras emociones. Tratan de comprobarlo, por ejemplo, con lo que llaman “males sin daño”, como es el caso de una persona que promete a su madre moribunda llevarle flores al cementerio si muere y, una vez muerta, no cumple su promesa. ¿Ha obrado moralmente mal? La madre no sufre ningún daño y, sin embargo, la mayoría de la gente está convencida de que está mal obrar así, pero no saben por qué. Y esta es la conclusión que sacan los expertos en cuestión: las gentes asumimos unas posiciones morales u otras sin saber por qué lo hacemos, nos faltan razones para apoyarlas. Cuando lo bien cierto es que en nuestras tradiciones éticas podemos espigar razones más que suficientes para optar por unas u otras, aunque se trate de cuestiones nuevas. Conocer esas tradiciones y aprender a discernir entre ellas es, pues, de primera necesidad para asumir actitudes morales responsablemente, para poder dialogar con otros sobre problemas éticos y para innovar.
Esto no se consigue en un día, por arte de birlibirloque, sino que requiere estudio, reflexión, diálogo abierto. Ese era el propósito de una asignatura, presente en el currículum de 4º de la Enseñanza Secundaria Obligatoria desde hace casi un par de décadas. Se llamó primero Ética. La vida moral y la reflexión ética, ahora lleva el nombre de Educación ético-cívica,y en su honor hay que decir que ha permanecido en su lugar a través de los cambios políticos. Sólo antes de que naciera se planteó el problema de si la ética era una alternativa a la religión, o si más bien era común a todos los alumnos, mientras que la religión quedaba como optativa. Afortunadamente, esta segunda fue la solución, y desde entonces ningún grupo social y ningún partido político han puesto en cuestión su presencia en la escuela.
Es lamentable, pues, que desaparezca en el Anteproyecto de ley orgánica para la mejora de la calidad educativa, cuando la calidad debería consistir sobre todo en formar personas y ciudadanos capaces de asumir personalmente sus vidas desde los valores morales que tengan razones para preferir, no solo en que los alumnos adquieran competencias y conocimientos para posicionarse en el mundo económico. Si se trata de “lograr resultados”, como dice a menudo el anteproyecto, ayudar a formar una ciudadanía responsable es un resultado óptimo y además es el único modo de contar con buenos profesionales.
Un buen profesional no es el simple técnico, el que domina técnicas sin cuento, sino el que, dominándolas, sabe ponerlas al servicio de las metas y los valores de su profesión, un asunto que hay que tratar desde la reflexión y el compromiso éticos. Justamente la crisis ha sacado a la luz, entre otras cosas, la falta de profesionalidad en una ingente cantidad de decisiones, el exceso de profesionales que utilizaron técnicas como las financieras en contra de las metas de la profesión, en contra de los clientes que habían confiado en ellos.
En un sentido semejante se pronuncia el economista Jeffrey Sachs al afirmar al comienzo de su último libro, El precio de la civilización, que “bajo la crisis económica americana subyace una crisis moral: la élite económica cada vez tiene menos espíritu cívico”. Y lleva razón, nos está fallando la ética, esa dimensión humana que no solo es indispensable por su valor interno, sino también porque ayuda a que funcionen mejor la economía, la política y el conjunto de la vida social. Hace falta, pues, en la educación una asignatura que se ocupe específicamente de reflexionar sobre los problemas morales, conocer las propuestas que nuestras tradiciones éticas han aventurado, y argumentar y razonar sobre ellas para acostumbrarse a adoptar puntos de vista responsablemente.
Claro que una modesta asignatura no basta, que no es la píldora de Benito que resuelve todos los problemas, pero una sociedad demuestra que una materia le parece indispensable para formar buenos ciudadanos y buenos profesionales cuando le asigna un puesto claro en el currículum educativo, no cuando la diluye en una supuesta “transversalidad”, que es sinónimo de desaparición. Y más si ese puesto es el que ahora tiene, 4º de la ESO, un momento crucial en el proceso educativo.
Una sociedad no puede renunciar a transmitir en la escuela su legado ético con toda claridad para que cada quien elija razonablemente su perspectiva, porque es desde ella desde la que podemos juzgar con razones sobre la legitimidad de los desahucios en determinadas ocasiones, sobre la obligación perentoria de cumplir los objetivos de desarrollo del milenio, sobre la injusticia de que las consecuencias de las crisis las paguen los que no tuvieron parte en que se produjeran, sobre la urgencia de generar acuerdos en nuestro país para evitar una catástrofe, sobre la indecencia de dejar en la cuneta a los dependientes y vulnerables. Es desde esa dimensión de todo ser humano llamada vida moral desde la que se decide todo lo demás, una dimensión que es personal e intransferible, pero tiene que ser también razonable.
Adela Cortina es catedrática de Ética y Filosofía Política de la Universidad de Valencia y miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas
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